Día Mundial del Corazón

DÍA MUNDIAL DEL CORAZÓN. Los padecimientos cardiovasculares son la principal causa de muerte en México. La obesidad, la hipertensión, la diabetes y el colesterol elevado son algunos factores que pueden provocar un infarto al corazón.
Síntomas o signos de alerta
- Pérdida del conocimiento
- Sudor Frío
- Mareos y náuseas
- Debilidad o fatiga
- Dolor u hormigueo en los brazos
- Dificultad para respirar
- Dolor en el Torax
HABLEMOS DEL CORAZÓN
En la antigüedad, los egipcios representaban al corazón como el lugar en donde se generan los sentimientos.
Para ellos, en este órgano, residía el alma y la mente; incluso pensaban que cuando uno moría, el corazón se evaluaba durante el juicio ante Osiris (Dios egipcio de la resurrección y símbolo de la fertilidad) para saber si la persona había tenido buenos sentimientos y había llevado una vida honesta.
Más allá de la conceptualización de cada persona o cultura sobre este órgano, la realidad es que el corazón es un músculo del tamaño del puño de la mano y de la misma manera que el motor mueve un automóvil, el corazón mantiene el cuerpo funcionando.
Los verdaderos problemas del corazón poco tienen que ver con el amor y los sentimientos, y mucho que ver con el tabaquismo, sedentarismo, diabetes, estrés y obesidad, por mencionar algunos.
PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTE EN EL MUNDO SEGÚN LA OMS:
Cardiopatía coronaria: enfermedad de los vasos sanguíneos que irrigan el músculo cardiaco.
Enfermedades cerebrovasculares: enfermedades de los vasos sanguíneos que irrigan el cerebro.
Arteriopatías periféricas: enfermedades de los vasos sanguíneos que irrigan los miembros superiores e inferiores.
Cardiopatía reumática: lesiones del músculo cardiaco y de las válvulas cardíacas debidas a la fiebre reumática, una enfermedad causada por bacterias denominadas estreptococos.
Cardiopatías congénitas: malformaciones del corazón presentes desde el nacimiento.
Trombosis venosas profundas y embolias pulmonares: coágulos de sangre (trombos) en las venas de las piernas, que pueden desprenderse y alojarse en los vasos del corazón y los pulmones.