LA GÜERA RODRÍGUEZ

María Ignacia Rodríguez de Velasco, mejor conocida como «la Güera Rodríguez».
En la versión de algunos historiadores, su figura eclipsa a otras más emblemáticas como Leona Vicario (declarada «Benemérita y Dulcísima Madre de la Patria» en 1842) y Josefa Ortiz de Domínguez, incluso se le llegó a llamar «madre de la patria».
Criolla perteneciente a la alta sociedad -por eso lo de «güera», como se le llama en México a quien tiene los cabellos o la piel clara-, se le atribuyen ideas liberales que chocaron con los cánones conservadores de la época.
Asistió a reuniones políticas clandestinas con personajes como el cura Miguel Hidalgo, considerado el «padre de la patria» en México por su llamado a la emancipación contra el gobierno de la Nueva España.
«En 1811 la Santa Inquisición la acusó de estar relacionada con el cura Hidalgo, así como su tendencia al adulterio, mancebía y bigamia. A raíz de esto fue expulsada a Querétaro, donde estableció amistad con doña Josefa Ortiz de Domínguez y la academia literaria, adhiriéndose al grupo de conspiradores», cuenta Gaspar Hernández Ranulfo, investigador del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México.